El Tángano: resultado de malas administraciones.

Afirma César David Tarello Leal, abogado postulante y maestro de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), que El Tángano es víctima de una mala planeación de administraciones estatales y municipales anteriores.

En entrevista con PLAZA DE ARMAS, El Periódico de Querétaro, el experto calculó que desde 1997, cuando Ignacio Loyola Vera fungía como gobernador del estado, y Francisco Garrido Patrón era presidente municipal de la capital, ambos militantes del Partido Acción Nacional, nacieron malas planeaciones y malas ejecuciones, “vicios” que, dijo, hasta la fecha se han arraigado en las administraciones.

“Me atrevo a decir que me parece que ha habido una mala planeación y, sobre todo, una mala actividad administrativa, porque no solamente es planear, sino que cuando se realiza un decreto para proteger una zona lo tienes que publicar, tienes que notificarle a los afectados que están en un área protegida”.

Tarello Leal aseveró que desde el ámbito jurídico la resolución de la corte a favor de Flecha Amarilla radica en la manera en la que Querétaro realiza los actos para decretar sus reservas forestales; además, comentó que cabe la posibilidad de que esta persona moral haya ganado el caso porque las autoridades encargadas no le notificaron que el predio estaba instalado sobre Área Natural Protegida.

“Lo que yo le puedo decir es que creo que en el estado de Querétaro desde hace muchos años ha habido muchos problemas en las declaratorias del Programa Municipal de Protección al Ambiente para proteger ciertas áreas ecológicas, o en el decreto de reservas, y El Tángano ha tenido muchos problemas en ese sentido”.

Sin embargo, afirmó que aunque Flecha Amarilla sea propietario del predio, existen lineamientos que debe respetar, ya que el hecho de que esta persona moral sea el dueño no autoriza la deforestación de la zona, esto de acuerdo con la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, y la Ley General de Vida Silvestre, que es en donde se encuentran las reglamentaciones generales y se estipula que para deforestar la zona es necesario solicitar un permiso a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para efecto de que nieguen o autoricen el permiso de considerarlo forestal.

Recordó que durante la administración municipal de Francisco Garrido se decretó a El Tángano como área de reserva, pero que en la de Armando Rivera Castillejos se retiró el concepto de protección, y que incluso nunca estuvo bien publicado en el Periódico Oficial La Sombra de Arteaga, situación que hoy tiene consecuencia para todos los queretanos.

Fuente: Plaza de Armas

Abigail Ávila

ECOLOGISTAS DE JURIQUILLA, AC

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